sábado, 27 de abril de 2013

PRESENTACIÓN DEL LIBRO "EL MITO DE LOS DEBERES"

Hola a todos y todas:
El próximo miércoles 8 de mayo a las 19:00 h se presentará ,en la librería MUGA de Vallecas, el libro de Alfhie Kohn "El mito de los Deberes", en el que se nos invita a la reflexión sobre el cada vez más polémico tema de los "deberes escolares". Si el tema suscita tu interés, éste es el libro que estabas esperando. Presentará el libro Miguel Carlos Martínez (maestro que ha traducido el libro al castellano) y varios profesores y representantes de las familias.
Será una buena ocasión para abrir este debate y que empecemos a alzar la voz todos aquellos/as que hemos luchado contra ellos, en silencio y con la sensación de ser la descarriada oveja que bala a contracorriente.
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Más información en el blog
Un saludo
Ramón

martes, 18 de diciembre de 2012

INICIATIVA SOLIDARIA EN RIVAS


Personalmente me ha emocionado esta iniciativa y me hace sentirme orgulloso de mi barrio, de la Escuela Pública y de un colegio tan querido para mí como el Dulce Chacón ¡Qué ejemplo de humanidad y de dignidad! ¡Ole por vosotr@s!






PD: Ya tengo dos y volveré a por más

INICIATIVA SOLIDARIA DULCE CHACÓN
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LANZAMIENTO MUNDIAL DE LA CAMISETA MÁS ESPERADA DE LA TEMPORADA
Esta iniciativa parte de un grupo de madres y padres de alumnos del Colegio Público Dulce Chacón, ubicado en el municipio de Rivas Vaciamadrid, cuando en una reunión del Consejo Municipal, la directora del colegio informa de la grave situación económica que están sufriendo un número importante de familias de alumn@s matriculad@s en este centro, hasta el punto de que algún@s de los padres manifiestan que la única comida que realizan sus hij@s es la que hacen en el colegio.
Ante esta situación, por la dirección del colegio se están realizando ingentes esfuerzos para mantener el comedor de estos niñ@s, pero sus recursos son muy escasos por lo que, en breve, se verán obligados a suspender su ayuda en este sentido, ya que son muchas las necesidades que tienen que atender para mantener un nivel de educación digno en sus aulas.
Por ello, este grupo de padres ha puesto en marcha varias iniciativas para conseguir fondos, entre ellas, la venta de esta camiseta solidaria, aprovechando y en apoyo a la contestación social generalizada que ha surgido como protesta a esta merma brutal de derechos sociales y económicos de todos los ciudadanos.
Los fondos que obtengamos los destinaremos a apoyar al CEIP Dulce Chacón para cubrir sus necesidades porque:
  • Entendemos que no podemos permitir que ningún niñ@ tenga dificultades de alimentación en el colegio o en su casa por falta de recursos. El hambre no puede estar presente entre nuestros niñ@s.
  • Entendemos que todos los niñ@s tienen derecho a la igualdad de oportunidades, y a una educación digna y de calidad, y no podemos permitir que algún@s de nuestr@s niñ@s no puedan participar en las actividades del colegio por falta de materiales.
Pensamos que, ante la inactividad del Estado a través de sus autoridades educativas, que abandona a l@s alumn@s a la suerte que puede correr cada familia, la solidaridad debe jugar un papel importante para apoyar a las familias con necesidades económicas ante la situación actual. Entre tod@s debemos asegurar la igualdad de oportunidades de tod@s l@s niño@s que se forman en nuestro colegio.
AMPA DEL CEIP DULCE CHACÓN
Haz tu pedido en: solidaridad.dulce.chacon@gmail.com Esta dirección de correo electrónico está protegida contra los robots de spam, necesita tener Javascript activado para poder verla

¿POR QUÉ NO NOS GUSTA LA LOMCE?


lunes, 17 de diciembre de 2012

POR UNA SANIDAD PÚBLICA

DESDE FUERA
Artículo de Opinión
Desde fuera es un imponente edificio de color gris. Donde antes solo había campo ahora hay un hospital.
Desde fuera, según te vas acercando, notas que pasa algo.
Hay sabanas con frases escritas (SE VENDE HOSPITAL), (LA SANIDAD PUBLICA NO SE VENDE, SE DEFIENDE) lo que va dando una idea de lo que ocurre.
Desde fuera, al llegar a la puerta, los carteles, las pancartas, los slogans, las pegatinas, lo ocupan todo, y sobre media mañana ocurre algo.
Un buen número de personas ataviadas con distintos "pijamas" de colores se reúne en el exterior. Azules, amarillos, verdes, blancos.
Desde fuera no se sabe muy bien quién es quién, pero parece que todos tienen el mismo problema.
Desde fuera se escucha decir que la sanidad debe ser publica, que no es algo con lo que se deba hacer negocio, que con la privatización perdemos todos....
Desde fuera no se ve muy bien cuál es el problema. A fin de cuentas nadie va a tener que pagar por la atención sanitaria, sea su gestión pública o privada.
Desde fuera parece que esta "rabieta" de los sanitarios es el recurso del pataleo..
Y como desde fuera no tenemos todo el escenario a la vista, nos colamos dentro para tener una perspectiva más amplia.

Desde dentro todo cambia.
Desde dentro se puede ver el trabajo que día a día realizan los profesionales de la salud.
Desde dentro se puede oír que el principal tema de conversación no es la pérdida de algunos puestos de trabajo ni de algunos "privilegios", sino la preocupación por el declive de la calidad de la asistencia sanitaria.
Desde dentro se ve cómo cientos de profesionales, de forma libre y sin depender de presiones sindicales ni políticas, han dejado a un lado su vida, sus familias, sus hobbies, sus amigos, y el día en que conocieron la noticia decidieron dar un paso adelante y plantar cara.
Desde dentro puedes ver como se han ido organizando, cómo han ido llamando a las puertas necesarias y adecuadas para dar a conocer su mensaje.
Puedes ver a médicos reconvertidos en "community manager" recopilando información y distribuyéndola a través de redes sociales, puedes ver DUE,s (enfermer@s) dando ruedas de prensa y hablando frente a una cámara de televisión, auxiliares diseñando carteles y pancartas, técnicos, fisioterapeutas, todos ellos moviéndose en el mismo camino.
Desde fuera se ven los carteles, se oyen los gritos y las canciones, se vé gente moviéndose, pero desde dentro se aprecia el trabajo, la dedicación, la preocupación, los nervios.
Desde dentro se ven cosas que desde fuera no se aprecian en su totalidad, pues todos estos profesionales de la salud no están de vacaciones, no son liberados sindicales y no dejan de hacer su trabajo.
Desde dentro los ves llegar por la mañana entre una nube de pitidos de "whatsapp", con el móvil en la oreja ya echando humo, aun con el sueño de la noche anterior pegado en los parpados.
Desde fuera ves un cambio de turno.
Desde dentro ves un cambio de actividad.
El que sale de trabajar entra a luchar, y el que entra a trabajar está apoyando al que está luchando.
Desde fuera ves que en la entrada principal, frente a una mesa llena de hojas, hay personas solicitando tu firma, tu apoyo a sus protestas.
Desde dentro ves un salón de actos convertido en centro de control de las distintas áreas en las que se están moviendo.
Desde fuera podrías llegar a pensar "mira estos, en vez de estar trabajando se dedican a montar este fregado".
Desde dentro comprendes que nadie ha dejado de trabajar, sino que están trabajando tres veces más.

Y entonces lo ves.

¿Por qué son los sanitarios los que están protestando?
Porque nadie mejor que ellos sabe cuál es, cual va a ser el problema, porque tú lo ves desde fuera pero ellos lo ven desde dentro.
Porque gran parte de su lucha consiste en informarnos a los pacientes y usuarios de la sanidad pública de lo que se nos puede venir encima.
Porque sí, algunos de ellos van a perder su puesto de trabajo y otros van a ver modificadas notablemente sus condiciones laborales, y eso también en una noble causa por la que luchar.

Desde fuera se vé a estas magnificas personas dejándose la piel, la vida e incluso la salud por hacernos llegar un mensaje.
Desde dentro se piensa que cuando el mensaje llegue a todos sus destinatarios, muy probablemente no hará falta continuar con las movilizaciones, pues más que ellos, somos los ciudadanos los que continuaremos la protesta.
Desde fuera podría pensarse que los sanitarios tienen un problema, pero... eso es un error.
El problema lo tenemos los usuarios del sistema sanitario.
Médicos, DUE,s, auxiliares, todo el personal sanitario es bastante probable que se vaya a trabajar a otro sitio. Con mejores o peores condiciones, de acuerdo, pero lo harán.
Los ciudadanos no. Los ciudadanos tendremos que seguir asistiendo al centro hospitalario que nos dejen, sea de gestión pública o privada, y allí sufriremos o soportaremos lo que nos hayan dejado.
Cuando una enfermera pase por nuestra habitación con los guantes de látex puestos, quizá tengamos que preguntarnos si esos guantes acaban de salir de una caja o si llevan en sus manos varias horas para que a final de mes la cuenta de resultados de su departamento de un resultado positivo en última línea.
Cuando llevemos a nuestros hijos a urgencias y tengamos que esperar a que un saturado profesional pueda llegar hasta nosotros para limpiar la sangre y dar algunos puntos, pocos por supuesto, que son caros, pensaremos si preferíamos que nuestros impuestos hubiesen pagado algún sanitario más en vez de rescatar bancos, pagar deudas o ipads de diputados.
Y no es que vayamos a tener un peor trato por parte de los profesionales de centros privados, pues quien es un profesional lo es siempre.
Pero a ese profesional no le van a dejar hacer su trabajo con la misma soltura que antes, pues tendrá límites en el uso de medios y tendrá que justificar cualquier material, además de trabajar jornadas maratonianas que no le dejaran responder con la misma soltura.
¿Derroche de medios?
Por favor, si algún día estoy ingresado en un hospital, sangrando en una sala de urgencias, esperando en la antesala de un quirófano... por favor, derrochen medios.
Desde fuera se ve la lucha de los profesionales de la salud.
Desde dentro se ve la lucha por la sanidad, y eso, amigos y vecinos, no es patrimonio de los profesionales; es un derecho de todos los ciudadanos.
Desde fuera deberíamos sentir orgullo y admiración por ellos y apoyar cada unos de sus movimientos a sabiendas de que no es su lucha; debería ser la nuestra.

lunes, 10 de septiembre de 2012

ARTÍCULO INTERESANTE PARA ENTENDER LO QUE ESTÁ PASANDO

Artículo imprescindible:
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2012/09/06/actualidad/1346927581_579219.html
Los recortes y reformas que está imponiendo el ministro Wert suponen una auténtica masacre de la educación pública y una vuelta al modelo escolar franquista, elitista y segregador. Darán al traste con los principales avances en la educación pública que se habían conseguido durante la democracia, como un incremento notable de la red de centros públicos y de profesorado, bajada de ratios de alumnado por aula, ampliación de la edad escolar obligatoria, escolarización casi total desde los 3 años y mayor acceso a estudios superiores de las capas populares.
Esta línea de conquistas viene siendo sistemáticamente atacada desde hace tiempo, en diferentes Comunidades Autónomas, especialmente por los gobiernos del PP, cuya ideología mercantilista y privatizadora (“menos Estado y más mercado”) quiere convertir la educación en un negocio, poniendo gran parte de los nuevos centros educativos en manos de la enseñanza privada concertada, mayoritariamente católica. Este proceso de privatización, que pretende convertir la escuela pública en subsidiaria de la privada, se ha acentuado de forma exponencial en los últimos años. Y más ahora que, con el pretexto de la crisis, se está aplicando todo un programa sistemático de recortes sociales y de estrangulamiento económico de lo público.
Los recortes aplicados suponen no sólo la pérdida de 100.000 plazas de profesorado para el próximo curso, sino que conllevan además la eliminación progresiva de la educación de 0 a 3 años como etapa educativa, la práctica desaparición de la formación permanente del profesorado, la precarización de la función docente (mas horario lectivo, menos retribuciones, sustitución de bajas sólo a partir del décimo día) y la masificación de las aulas (brutal aumento del 20% de la ratio alumnado-aula), que tendrán una grave repercusión en la calidad educativa.
Estos tijeretazos se suman a los que ya han hecho las propias CCAA en años precedentes, reduciendo plantillas, salarios, gastos de funcionamiento de centros, tutorías, desdobles y apoyos, materias optativas, programas de apoyo y refuerzo, módulos de formación profesional, servicios de orientación o biblioteca, ayudas para adquisición de libros de texto, de comedor y actividades complementarias. Con estas medidas, el incremento del fracaso escolar está asegurado.
Y todo ello a la vez que se han extendido los conciertos educativos, incluso en etapas no obligatorias. No sólo se está subvencionando a familias que optan por centros privados de élite, sino que la financiación pública a la educación privada ha crecido un 30% entre 2005 y 2010, en plena época de crisis y recortes a la educación pública, según los recientes datos del INE.
A todo esto hay que sumar el salvaje recorte en Educación Superior y en I+D+i, a la par que la feroz subida de tasas universitarias, el aumento de horas lectivas del profesorado universitario, convirtiendo la docencia en una especie de “castigo” para los no investigadores y expulsando al profesorado asociado por miles.
Este proceso de privatización, segregación y desmantelamiento de la educación pública se busca justificar ideológicamente con la enésima reforma educativa, que ha anunciado el ministro Wert, eufemísticamente denominada 'Ley Orgánica de Mejora de la Calidad de la Educación'. Esta auténtica contrarreforma educativa no sólo da pasos en sentido contrario a los criterios pedagógicos actuales y a las evidencias científicas vigentes en el campo de la educación, sino que avanza exactamente en sentido contrario, recuperando las reválidas superadas del franquismo, atacando frontalmente la equidad social y segregando al alumnado desde los 12 o 13 años. Sus ejes básicos giran en torno a seis principios fundamentales.
El primero, convertir la educación en una carrera constante de obstáculos y superación de pruebas y reválidas al final de cada etapa. Apuesta por un modelo de enseñanza basado en la presión del examen, frente a un modelo educativo más centrado en las necesidades y motivaciones del alumnado. Es lo que el PP entiende por “cultura del esfuerzo” y “carrera meritocrática”. En vez de buscar estrategias y formas de motivar y entusiasmar al alumnado por el conocimiento y el aprendizaje, se concibe la educación como un camino de penitencia y sufrimiento, trufado de pruebas y exámenes continuos, que convierte la educación en un auténtico viacrucis recuperando el espíritu franquista de la “letra con sangre entra”, en el que las condiciones culturales y socioeconómicas familiares van a ser determinantes del éxito escolar.
El segundo eje sobre el que pivota esta contrarreforma es reducir el número de asignaturas y centrar la carga lectiva en unos contenidos mínimos, que es lo que se viene llamando en la terminología neoconservadora “volver a lo básico”. Dedicar así la educación obligatoria a preparar mano de obra barata, dotada con meros conocimientos instrumentales básicos para acceder a un futuro mercado laboral precario y en constante rotación. Lo que Berlusconi resumió con el lema de las tres “ies”: “Inglese, Internet, Impresa” (traducido en España, este último, por “espíritu emprendedor”). Sólo quienes logren superar todas las reválidas que se pretenden imponer podrán acceder a una formación más completa y cualificada, dirigida a cubrir empleos técnicos intermedios o a puestos directivos quienes puedan pagarse las nuevas tasas de los máster universitarios.
El tercer principio es segregar, seleccionar y clasificar cuanto antes al alumnado mediante “itinerarios”. Itinerarios que son una restauración de la LOCE de Aznar y que no conducen a reducir el abandono y el fracaso escolar, sino a eliminar progresivamente la igualdad de oportunidades y la formación común durante la etapa obligatoria. Se deriva cuanto antes a la población escolar con mayores dificultades hacia la FP, convirtiéndola de nuevo en una vía de segunda categoría, destinada a quienes no logren acceder a Bachillerato. Los programas de cualificación profesional, una vía para aquel alumnado con mayores dificultades de aprendizaje y que sólo se tiende a utilizar en último extremo, después de haber agotado todas las medidas de atención a la diversidad, se adelantan a partir de 2º de la ESO, es decir, con menos de 15 años. Además se empuja a estos programas al alumnado que tenga “situación socioeconómica desfavorable”, equiparando así pobreza y poca capacidad para el estudio, poniendo al mismo nivel ambas realidades, la de tener dificultades en los estudios con vivir en una familia con bajos ingresos económicos.
El cuarto elemento de esta nueva reforma educativa busca someter los centros educativos a las exigencias del mercado, especialmente a la competitividad, estableciendo pruebas externas a nivel nacional, para ofrecer una clasificación de colegios según sus resultados. Con el fin de que los “clientes” puedan comparar y elegir aquél que más ventajas competitivas les aporte a sus hijos e hijas en el futuro mercado laboral. En este mercado competitivo las escuelas se hacen más selectivas, tendiendo a rechazar al alumnado que presenta mayores dificultades y que pueda hacer descender posición en el ranking de centros.
El quinto elemento de esta contrarreforma es la instauración, en coherencia con este modelo de competencia, del ‘pago por resultados’, propio del mundo empresarial, en el ámbito educativo. Se trata de aplicar refuerzos e incentivos a los centros, no ya en función de las necesidades de su alumnado, sino de acuerdo con el puesto en el ranking. Ya se está aplicando en algunas Comunidades Autónomas, condicionando la financiación pública a los resultados obtenidos, mediante los contratos-programa u otras fórmulas similares.
Finalmente, se complementan la resurrección de estas viejas recetas franquistas con el sexto eje, la denominada “Nueva Gestión”. Es decir, gestionar los centros públicos según las recetas de la empresa privada, mediante una mayor autonomía financiera que requiera de fuentes de financiación privadas ante la insuficiencia de la financiación pública. Financiación externa de patrocinadores que imponen sus logotipos y exigencias, introduciendo los intereses privados y mercantiles en la educación pública. A ello se añade la especialización de los centros para ofrecer una oferta competitiva y “diferenciada” a la clientela; así como la “profesionalización” de la dirección escolar como gerentes, expertos en gestión empresarial y de recursos humanos, que gestionarán los centros educativos públicos de forma “eficiente” y con rentabilidad económica.
Por eso es más urgente que nunca que la comunidad educativa aúne esfuerzos y comparta iniciativas contra estas políticas educativas del PP, que suponen el ataque más grave a la educación pública desde la transición, que nos retrotrae al modelo de escuela franquista y que, con la excusa de la crisis, pretende convertir la educación pública en una red subsidiaria y asistencial, mientras potencia e impulsa el negocio creciente de enseñanza privada concertada en nuestro país. Nos jugamos el futuro de nuestros hijos e hijas, y el de la sociedad en su conjunto.
Enrique Javier Díez Gutiérrez es profesor de la Universidad de León y Coordinador Federal del Área de Educación de Izquierda Unida